lunes, 11 de septiembre de 2017


TÍTULO:  LEÓN EL AFRICANO
AUTOR:  AMIN MAALOUF



Primera novela de este autor franco-libanés nacido en Beirut y exiliado en Francia desde 1976 a causa de la guerra civil libanesa de 1975. Se publica esta novela, escrita en francés, en 1986.

El personaje principal, cuya biografía novelada se narra, es conocido como León el Africano. Este nombre cristiano corresponde al árabe Hassan ben Muhammad al Wazzan al-Fasi, o sea, Hassan hijo de Mohamed el alamín de Fez.
Este incansable viajero renacentista (siglo XVI), puede que naciera en Granada hacia 1488 y muere en 1554. Vive siendo niño los últimos años del reinado de Boabdil y la toma de Granada por los Reyes Católicos. Tras la expulsión de estas tierras, su familia se exilia en la ciudad de Fez en el norte de África. Granada y Fez, lugares de su infancia y juventud, junto con El Cairo y Roma serán las cuatro ciudades que darán nombre a las cuatro secciones en que se divide el relato. Otros lugares por los que viaja serán Tombuctú y los reinos comprendidos entre los ríos Níger y Nilo.
El autor lo hace aparecer durante los pontificados de León X, Adriano VI y Clemente VII, con episodios tan notables como el saqueo de Roma; también con los reinados de dos emperadores otomanos: Selín I y Solimán el Magnífico. Los destinos de Europa están, avanzando el relato, en manos de Carlos I y Francisco I de Francia. Estos dos grandes imperios pugnan por la supremacía en el Mediterráneo. Los otomanos amenazan infructuosamente a Europa que bulle con las nuevas ideas de Lutero.
León, que guiado por su pasión por viajar y vivir todo tipo de experiencias, se ha posicionado como un buen embajador e interlocutor, media entre ambos imperios por su gran conocimiento de lenguas y cultura oriental y occidental; entre el mundo cristiano y musulmán y sus distintas formas de entender la vida. Los papas León y Julio, ambos Médicis, le tienen en gran estima.
Novela llena de episodios históricos de este ensayista, periodista y novelista; Premio Príncipe de Asturias de las Letras (2010), miembro de la Academia Francesa (2011) y otros premios entre ellos el Goncourt.

domingo, 10 de septiembre de 2017

EL HIJO DEL DESIERTO


TÍTULO: EL HIJO DEL DESIERTO
AUTOR: ANTONIO CABANAS



Durante la dinastía XVIII del Antiguo Egipto, época de los faraones guerreros, transcurre esta novela histórica cuyo protagonista principal es el guerrero Sejemjet, personaje ficticio al que el autor le asigna un origen enigmático. Él será quien nos lleve desde las tierras del país de Kusk hasta las orillas del Eúfrates en sucesivas campañas promovidas por Tutmosis III, donde mostrará sus excelentes dotes para la milicia.

Resentido por no haber tenido una infancia adecuada y feliz, sin conocer a sus verdaderos padres, saca toda su rabia en el combate. Favorecido en ocasiones por el faraón y altos mandos pero rechazado y desterrado en otras, sobrevive a peligros, desgracias y envidias, forjándose en él una fuerte personalidad y un carácter indómito.
A lo largo de la narración se ponen de manifiesto el valor de la amistad con su amigo Mini, la fidelidad a las dos mujeres que amó, la pasión por su país al que se describe magnificamente, desde las fértiles riberas del Nilo a los desolados desiertos. La vida en la ciudad de Tebas y el templo de Karnak, las fiestas en el palacio del faraón, las luchas por el poder... y cómo no, las grandes batallas que se libraron contra sus enemigos fronterizos que le proporcionaron pingües beneficios con los que engrandecieron el país emprendiendo grandes obras arquitectónicas.
Otros personajes secundarios como su fiel compañero Senu, mitad bufón mitad soldado; la princesa Nefertiry, su gran amor de juventud; Mini su amigo desde la infancia, Isis hermana de éste último, con quien consigue finalmente la estabilidad, el sacerdote Hor que le instruye... y otros más que acompañan al lector en una trama un tanto consabida pero que son la excusa perfecta para adentrarnos de una forma amena en el reinado de Tutmosis III y parte de Amenhotep II.
Se integran también en la narración la religión y sus antiguos dioses tan presentes en la vida de los egipcios de entonces.
Muy bien la narración pero no tanto los diálogos que emplean una forma de hablar casi actual. Quizás haya tenido el autor que aceptar ésto para no aburrir y cansar al lector.