_ Él jamás abriría la boca como un papanatas ante la impudicia de los gobernantes de un país hambriento.
_ ...el encarecimiento de los productos básicos y la venta de ganado al extranjero provocaban el hambre en todo el país; los sueldos miserables de los trabajadores no alcanzaban para mantener a sus familias; las huelgas habían sido reprimidas con dureza y sus promotores habían acabado encarcelados, incluso ejecutados, o exiliados; las levas militares obligatorias, que podían ser eludidas sin embargo mediante la llamada "redención a metálico"por la desorbitada suma de mil quinientas pesetas, el sueldo de un año de un obrero, sólo al alcance de los hijos de los adinerados, afectaban gravemente a los más humildes, así como la inestabilidad de los sucesivos gobiernos, nueve en tres años, suscitaban el desaliento incluso entre los más optimistas.
_ Como si sintiera la necesidad de confiarse a alguien, el hombre comenzó a hablar, más para si mismo que para su oyente. Había estudiado Filosofía y Letras, conocido a Giner de los Ríos, a Gumersindo de Azcárate, y a otros magníficos pensadores, fundadores de la Institución Libre de Enseñanza, quienes se habían negado a acatar el Decreto Orovio, por el cual se suspendía la libertad de cátedra en España para todo aquel que no se ajustase al dogma oficial en materia religiosa, política o moral.
_ ... las importaciones masivas de cereales a un precio menor que el nacional para beneficio de cuatro especuladores había llevado a los campesinos a la miseria, y ello había repercutido en las empresas de herramientas vascas, así como en las textiles catalanas; la hambruna se abatía sobre el país, en especial sobre Andalucía y Extremadura; la falta de trabajo había obligado a miles de españoles a cruzar el océano en busca de una vida mejor; cientos habían muerto lejos de su tierra defendiendo los restos del antiguo imperio y eran incontables el número de desaparecidos.